El mundo se ha enfrentado a un evento global inesperado e inevitable de carácter catastrófico, que ha implicado la interrupción de la actividad empresarial motivado a las amenazas directa a la vida del recurso humano, afectando los activos crÃticos, la estructura financiera e incluso la reputación, exponiendo la propia supervivencia de las compañÃas. Todas las variables indicadas del escenario presentado conllevan a la definición de CRISIS.
Una vez más tenemos la oportunidad de aprendizaje y preguntarnos como organización empresarial de menor, mediana o gran escala: ¿Se poseÃa con un Plan de Gestión de Manejo de Crisis? De tenerlo ¿Cubrió las expectativas esperadas?, ¿Qué mejoras requerirÃa? Sin embargo, es importante acotar, que ningún Estado, Institución Pública y Empresa Privada, consideraban en su plan de gestión de manejo de crisis un escenario de naturaleza extraordinaria y exógena como el presentado. Pero es otra lección que nos llama a la reflexión de su necesidad.
Los estudios revelan que las probabilidades de que las compañÃas se vean afectadas por una crisis es de un evento cada cinco años.
Hoy se confirman que las crisis se producen en entornos cada vez más complejos y por ende la gestión de estas requieren de mayor especialización y conocimientos. Sumado a que hoy en dÃa nos enfrentamos a una variable adicional que son las redes sociales y sus efectos, a través de las cuales a una velocidad impresionante se propagan noticias y comentarios que pueden favorecer o desfavorecer el escenario en cuanto al manejo de la incertidumbre.
Son muchos los tipos de eventos o peligros que pueden afectar a una compañÃa y generar una crisis. De allà la importancia de considerar los posibles escenarios por su naturaleza y causas, lo que nos permitirá tratarla y gestionarla de manera individualizada y acorde a la misma, evitando caer en la generalización.
Ante lo expuesto dentro del ámbito de la prevención es importante establecer o mejorar los planes integrales de gestión de crisis, definiendo y desarrollando estrategias adecuadas en la preparación, respuestas, recuperación y evaluación de resultados, que nos permitirá evolucionar como empresa y estar mejor preparados para enfrentar otras crisis eventuales del futuro.